Seguimos festejando los 70 años de TRAFER y no podía faltar una pieza fundamental como Alberto Vega y su hija Rita.
Los Vega son un ejemplo del espíritu familiar de TRAFER. Así como los Fernández, su compromiso con la empresa atravesó más de una generación. Quien inauguró esta relación fue Alberto Vega, quien se incorporó en 1963.
Con experiencia como administrativo en firmas del rubro agropecuario, Vega se acercó a Fernánez y Travaini interesado en la proyección que ofrecía el taller de Moreno, cuyo progreso era notorio y conocido en Tres Arroyos.
Su notable inteligencia y versatilidad permitió que se desempeñara en múltiples roles, de acuerdo a los diferentes cambios que sufrió el directorio de TRAFER a lo largo de los años.
Comenzó en el área administrativa, fue jefe de armadores en las cuadrillas y en el directorio pocos meses antes de su trágica partida en 1986.
Su sorpresiva desaparición motivó que una de sus hijas, Rita, se uniera a TRAFER. Hasta ese momento, Rita Vega ejercía como docente de matemática y astronomía en varios colegios de Tres Arroyos.
Rita, con esfuerzo y personalidad se ganó el respeto y el cariño de una planta que hasta esos días era exclusivamente masculina. Con la ayuda de los hermanos Fernández y Jorge Polognoli fue familiarizándose con las tareas administrativas que otrora realizara su padre, a la vez que veía cómo los muchachos del taller ponían cuidadoso esmero en integrarla.
Hacia fines de la década del ’80, su labor en las oficinas se había vuelto vital: realizó un profundo ordenamiento en materia de archivo e impulsó poco antes de la mudanza hacia Castelli la informatización de toda la actividad administrativa.
Trafer 70 AÑOS DE CALIDAD EN PLANTAS DE SILOS
